Embrollo

A veces no sé porque escribo... estoy mal, sé porque escribo, pero no sé para quien. No suelo etiquetar a las personas, pero siento que nadie esta tan "no cuerdo" para entender estas sandeces. Tal vez soy arrogante al estar escribiendo estas líneas que se salen del contexto de la melancolía con la que he escrito la mayoría del contenido de este blog, sin embargo creo que este es como un "argüendeando" (una etiqueta que utilizo... utilizaba) en el que me quejo de mi misma (al menos para mi eso es argüendear XD) y pues, es cierto...

Últimamente he estado taciturna y, si bien, aun escribo no hay nada -por ahora -con que me sienta a gusto para ponerlo aquí. Y es que aun quedan tantas palabras que escribir, tantos temas del que quejarme, tantos recuerdo que derrochar y tantos amores baratos para los cuales escribir; pero este tiempo no es el tiempo para escribir; me quede con esa sensación de estancamiento desde que se murió mi pa (hace meses, creo) que ni con la muerte de mi abuelo había pasado (claro mi padre siempre fue mi padre no importa lo que fuera)

Ahora trato con todas mis fuerzas de salirme de esa sensación, de volver a mi oscuridad y no estar en el limbo... de mandar al carajo a los musos que ya no están, porque solo me buscan para atormentarme.

Quiero mi soledad de vuelta, no con tantas gentes que van y vienen... esos fantasmas de personas que quieren ver en mí una luz y no se dan cuenta de que no la tengo (si buscan salvación, ¡largo!).

Que mas da, la vida ha llegado a ser, en cierto punto, horrible y detestable, pero ¿que puedo hacer? no estoy triste ni desdichada, no me siento con ganas de pensar en mi propia muerte... solo quiero envejecer y decir que ya viví, ser una ermitaña a quien nadie busque...

Rayos, tengo el corazón de una vieja... ¡que charada!

Tal vez, algún día vuelva a mi poesía, mientras tanto vagare por aquí de vez en cuando.

ATTE

Diana Albatou