Últimamente me envicié con un artista extravagante que tiene potencial, pero que el género que canta no me atrae mucho; sin embargo, lo vengo escuchando día y noche y ahora que sé que significan muchas de sus letras empiezo a odiarlo y a querer escuchar más de sus canciones.
Es como si las letras me llenaran de más, como si fuera un aderezo a lo que estoy sintiendo últimamente (la ansiedad, la desesperación), pero también me causan conflicto por todo la simbología que utiliza (contra mis valores y contra mis creencias religiosas).
Pero entre más me adentro, más me interesa, es como si con esto fuera a ser capaz de auto destruirme; como si estas canciones y sus bajos exagerados fueran una puerta para un nuevo vacío (aparte de esa yerba mala a la que he tomado afición).
Me estoy decostruyendo (y como odio esa palabra), me estoy consumiendo y me esta gustando.
Me pregunto si la ayuda que he buscado me ayudará a salirme de esta. También me pregunto porque tengo esta necesidad de hacerme daño, de tomar algo filoso y enterrarlo (ya fueron las manos... ¿podré hacer cortes más profundos?)
¿Por qué estaré pensando en todo esto? Me estoy dejando llevar tan brutalmente, tan natural que debería darme miedo.
Sé que tengo otros asuntos; en la cara que muestro a la sociedad tengo un buen trabajo, amigos, estoy tomando terapia, tengo una pareja y tengo planes para casarme; todos aprueban esa vida.
Sin embargo no la quiero... quiero hundirme, quiero destruirme cachito por cachito... al compás de nihil.
Me siento perdida, pero siento que me estoy encontrando (no como debería).
ATTE
D Albatou
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